El pasado jueves falleció en Barcelona Johan Cruyff, una de las grandes leyendas del deporte de fútbol. Como futbolista yo no lo puede disfrutar por una cuestión de generación, pero sí que lo pude hacer como entrenador.
Mucho se ha escrito al respecto de lo que significa para el deporte de la pelota este personaje holandés y no voy a ser yo quien añada más palabras a lo que se ha escrito en estos días. Yo simplemente diré una palabra: ¡gracias!
Gracias por hacerme disfrutar del dream team, gracias por hacer del Barça lo que es hoy en día y sobre todo gracias tu filosofía, «el fútbol se juega con la cabeza y se utilizan los pies para ejecutar las ideas».