Me sabe mal decirlo otra vez, porque al final me haré pesado, pero es que es la verdad, este mundo se va al garete y parece ser que nadie le importa o nadie quiere hacer nada. Que le pasa a la juventud, cuando hemos perdido el control sobre ellos o mejor dicho donde esta la capacidad del propio ser humano en saber hasta que punto nuestras actuaciones (ya no entraré en si buenas o malas porque eso es muy subjetivo) tienen un límite.
Si hace unas semanas escribía sobre el tema de una niña de 11 años la cual se gastaba 400 euros en maquillaje, hoy ha salido una noticia aún más desgarradora. El marido de la alcaldesa de Esparraguera (el que sea una persona publica poco tiene que ver en este asunto creo yo) moría a manos de tres menores tras recibir una agresión por parte de ellos. Si de acuerdo, seguramente fue un incidente fortuito, ya que falleció al caer de espaldas y producirse un golpe mortal, pero eso creo que carece de importancia.
Hemos pasado en menos de 30 años de un extremo a otro. De educar a nuestros hijos a base de golpes, a que depende lo que digas puedes ser tratado de maltratador psicológico y por tanto llegar hasta perder la custodia de tus propios hijos. Ni mucho menos pretendo justificar la bofetada pero creo que entre los dos puntos podemos encontrar una solución intermedia. Todos deseábamos, mejor dicho la gente mayor porque yo no lo viví, la llegada de la democracia a nuestro país, pero donde ha llegado la sociedad actual creo que no es lo que los fundadores de la constitución quisieron plasmar hace ya 30 años.
Y ahora que, ¿que pasará con estos jóvenes?, ¿serán encarcelados?, ¿cumplirán trabajos sociales?, pues la verdad no lo sé, para eso esta la justicia que debe determinar en base las leyes actuales, pero lo que si que tengo claro es que desde hoy mismo hay una familia más rota, y por causas que podrían haber sido remediadas si la sociedad quisiera poner medios para ello, y no ser tan indulgente con determinadas actitudes.
Como puse en un post hace un tiempo (Los padres que ejerzan de padres), una de las soluciones, aunque quizás no la única, pasa por que los padres dejen de ser los colegas de sus hijos y pasen a lo que tienen que ser, Padres, ni más ni menos.
Los chicos están descontrolados porque les falta amor, atención y educación, que deberían darles los padres en sus casas. Si seguimos así, vamos a terminar mal. Ojalá recapacitemos un poco, dejando a un lado el egoísmo, el materialismo y demás «ismos», y seamos un poco más espirituales.
¡Hasta pronto!
La violencia como actitud ya esta sembrada. El hecho de hacer barbaridades e incluso filmarlas esta al orden del dia.
La muerte de esta persona no ha sido un accidente. Ellos fueron a darle unas ostias a alguien que les habia recrimanado anteriormente… ¿es de recibo?.
Es normal el tipo ese que pego (y mato accidentalmente) a otro porque pensaba que le habia rallado el coche… En fin…
Vamos fatal!