Me he pasado toda la tarde leyendo posts y posts sobre el nuevo navegador Google Chrome, lanzado la semana pasada. Así sabia que me encontraría una vez instalado el programa nuevo, y la verdad es que me he encontrado lo que esperaba. Un navegador muy sencillo (demasiado a mi gusto) y rápido de carga para las webs.
Google nos tiene acostumbrado a que sus webs sean muy limpias estéticamente, y el nuevo navegador no podría ser una excepción. Estructurado en pestañas como lo hacen las nuevas versiones de los navegadores, muestra la novedad de que cada una de las pestañas se ejecuta de forma independiente. De esta forma nos aseguran que si se produce un cuelgue, se podrá cerrar esa pestaña sin alterar las demás.
La velocidad, que lo vendían como otro de los puntos fuertes del navegador, la verdad es que me ha sorprendido, es cierto, he probado la misma página con otros navegadores, y Google Chrome salía victorioso.
Otra novedad que presenta el navegador, es que la caja de la dirección se fusiona con la caja de búsquedas de tu buscador definido, por lo que introduciendo palabras en dicha caja, el propio navegador nos aconseja tanto en direcciones visitadas como en enlaces de nuestro buscador, sinceramente una buena novedad.
Todo podría se ventajas, simplicidad, velocidad, …, pero claro como cualquier cosa nueva le falta un poco de rodaje, y de ir ampliando las opciones, que bajo mi gusto son escasas. Por ejemplo he encontrado a faltar la barra de tareas de Google que puedes implantar tanto en Mozilla Firefox como en el Internet Explorer. Curioso que falte esta aplicación, ya que tanto el navegador como la aplicación pertenecen a la misma empresa.
Como resumen diría que se espera bastante de Google Chrome, pero yo de momento continuaré con Mozilla Firefox que lo tengo más a mano, y lo considero a día de hoy mucho mejor que Internet Explorer (el más implantado en la red).