El pasado domingo se celebraron en España, las elecciones generales a la presidencia del país, y en esta ocasión el actual presidente Jose Luis Rodríguez Zapatero no se presentaba a la reelección, por lo que si o si había nuevo presidente español.
Como se suele decir, la historia juzgará si ha sido un buen o mal presidente durante estos dos mandatos que ha estado al frente del gobierno español, y por tanto yo no haré juicios de valor en esta entrada. Sólo quiero decir ahora que se va, es que el señor Zapatero ha sido un cachondo mental. Y porque digo esto, pues básicamente por dos cuestiones, o mejor dicho por dos gestos que ha realizado, y que seguramente han crispado un poco (por no decir mucho) a un sector muy rancio de este país.
El primer de los gestos, es nombrar como ministra de defensa, a una mujer, encima catalana y que en esos momentos estaba embarazada. Ya me imagino a unos cuantos generales, el día que saltó la noticia gritando en sus despachos, “quien narices es ese zapateritos para meter a una mujer que espera un hijo, al cargo de las fuerzas armadas, y encima por si no fuera bastante catalana”. Sólo de pensarlo se me salta la sonrisa.
Y el segundo gesto que me ha parecido genial, o mejor dicho me ha parecido que ya era hora que se entrará en una cierta normalidad en este país, es el de convocar las elecciones el 20 de noviembre. Para aquellos que anden despistados, el 20N es el día en que murió el dictador Francisco Franco, cosa que aprovechan unos cuantos fachas para salir a la calles y proclamar a grito pelado, “antes con el caudillo se vivía mejor”. Si, todavía 35 años después de que este país recuperará las libertades, hay gente que lo echa de menos, si es que en esta vida ha de haber de todo.
Ahora le toca a Mariano Rajoy decidir la suerte de este estado del sur de Europa, aunque a mi me da, que no tendrá el mismo sentido del humor que su predecesor a la hora de tomar decisiones.
Es lo mismo, si no sale el Psoe en el año 2.016 saldra el PP y asi sucesivamente, algo falla…