Alemania se adjudicó ayer el campeonato del mundo de fútbol 2014 disputado en Brasil. Y ahora algunos dirán ¡por fin! un poco de descanso del deporte rey, ¡pues no!, ya que ayer mismo el Barça empezó la pretemporada.
Ni un día de respiro diréis, que cansinos con la pelotita, pero es lo que tiene el negocio, no se puede parar, o es que alguien duda que el fútbol sea un negocio.
Por suerte todavía quedan algunos aficionados que lloran cuando su equipo pierde, porque aquello de decir que los jugadores sienten los colores, se acabó ya hace muchos años.