Hasta ahora nunca lo he dicho, era un secreto que llevó muchos años ocultando a la gente que me rodea, pero ya no puedo más, lo he de confesar, yo trabajo para el CNI (Centro Nacional de Inteligencia).
Y para que esta declaración no caiga en saco roto, os aporto la prueba, una fotografía con otro agente del CNI, el pequeño Nicolás.